El apego, rodeado casi invariablemente por un antojo de olvido, avanza resuelto hacia las trampas creadas de cazar osos con epidermis sobre leopardo asi como serpientes con plumaje de condor.
En ti pensaba, en tus cabellos que el universo de la sombra envidiaria, y puse un tema sobre mi vida en ellos y quise yo sonar que tu eras mia.
Ando yo por la tierra con los ojos alzados -?oh, mi afan!- a tanta altura que en ira altiva o miseros sonrojos encendiolos la humana criatura.
Vivir: -Saber expirar; mismamente me aqueja este infausto encontrar, este bien fiero, y cualquier el Ser en mi alma se refleja, y tras desprovisto fe, de fe me muero.
40.- Fabian Zugaide – Grosera
Cuando estoy contigo y nos comemos a besos, llega el mutismo, y asi en silencio nos preguntamos quienes somos, donde nos conocimos, o que buscamos, quiza al completo esto lo respondemos con las ojos, con las miradas furtivas que tenemos al hacer un descanso, invariablemente ignorantes del temor a la expresion.
Invariablemente al mirarnos Existen la luces recondita sobre tibio color melancolico, una brillo que nos ensena perspectivas imprevistas, asi como que sera en si misma testimonio sobre alguna cosa que fue, que ya seria insostenible, tan quimerico como el unicornio.
41.- Angela Figuera Aymerich – «Me posees asi como soy tuya»
Me posees asi como soy tuya. Tan cerca alguno de el otro como la carne de los huesos. Tan cerca alguno del otro y, usualmente, ?tan lejos!… Tu me dices a veces que me encuentras cerrada, igual que de canto dura, igual que envuelta en secretos, impasible, remota… y tu quisieras tuya la llave de el misterio… Si no la tiene nadie… No hay espita. Ni yo misma, ?ni yo misma la tengo!
42.- Elsa Lopez – «Yo no deseo morirme sin conocer sobre tu boca»
Yo no deseo morirme sin saber sobre tu boca. Yo nunca deseo morirme con el alma perpleja sabiendote desigual, perdido en diferentes playas.
Yo nunca quiero morirme con este desconsuelo por el curvatura inconmensurable de esa cupula lamentable a donde habitan tus suenos al sol de mediodia.
Yo nunca quiero morirme carente haberte entregado asiandate las doradas esferas de mi cuerpo humano, la dermis que me recubre, el temblor que me invade.
43.- Luis Cernuda – «Contigo»
?Mi tierra? Mi tierra eres tu. ?Mi publico? Mi muchedumbre eres tu. El destierro asi como la muerte de mi se encuentran adonde no estes tu. ?y mi vida? Dime, mi vida, ?Que es, si no eres tu?
44.- Gabriela Mistral – «Dame la mano»
Dame la mano y danzaremos; dame la mano y me amaraso la sola piropo seremos, como una requiebro, asi como solo… El identico verso cantaremos, al mismo camino bailaraso la espiga ondularemos, como una espiga, y nada mas. Te llamas rosado y yo confianza; No obstante tu sustantivo olvidaras, porque seremos una danza.
45.- Rafael Alberti – «A la linea»
A ti, perfil de la gracejo humana, recta, curva, bailable geometria, delirante en la destello, caligrafia que diluye la niebla mas liviana.
A ti, sumisa cuanto mas tirana misteriosa sobre flor y astronomia preciso al sueno y la poesia urgente al curso que tu normativa dimana.
El ilimitado azul es tu palacio. Te canta el aspecto ardiendo en el lugar. A ti, andamio y sosten sobre la pintura.
46.- Oscar Acosta – «Carta desde Torremolinos»
Un lauro es tu mano dentro de mi mano asi como agua unitiva el rio de tu brazo, ansias somos unidas por un emboscada tenso de aguantar y frecuente.
El rozamiento de tus labios no fue en gratuito asi como de comprobarlo te doy plazo: sobre mi pecho sobre adulto esta tu trazo asi como tu aliento a mi boca esta cercano.